El síndrome de fatiga crónica (SFC), se conoce también como encefalomielitis miálgica (EM) genera cansancio incapacitante a largo plazo. Aparece entre los 20 y los 40 años siendo tres veces más frecuente en mujeres que en hombres.
Hoy en día no existe una cura, los síntomas varían y son diferentes para cada persona. La afectación con el tiempo es distinta en cada paciente. Cuanto antes se realice el diagnóstico mejor será el pronóstico a largo plazo.
Los principales son: constante cansancio el cual no mejora mucho al descansar y que se produce tras un día después de realizar alguna actividad.
Normalmente se desarrolla con otros síntomas como:
Estos son alguno de los síntomas, pero hay más de 40.
No se conoce la causa, aunque hoy en día se piensa que es una infección viral la causante del síndrome. Existen otros «desencadenantes» del SFC como:
El tratamiento incluye la ingesta de medicamentos y terapia.
Generalmente se diagnostica cuando el médico evalúa los síntomas y no encuentra otra causa. Para descartar otras afecciones, el médico puede solicitar análisis de sangre, de orina, y otras pruebas además de un examen clínico.
El médico puede tratar el dolor los síntomas del paciente con diversa medicación.
La fibromialgia es un trastorno caracterizado por dolor musculoesquelético generalizado acompañado por fatiga y problemas de sueño, memoria y estado de ánimo. Algunas investigaciones postulan que la fibromialgia amplifica las sensaciones de dolor ya que afecta el modo en que el cerebro y la médula espinal procesan las señales dolorosas.
La sintomatología suele comenzar después de un episodio concreto, ya sea un traumatismo físico, una infección, una cirugía, o un proceso estrés importante. Hay otros casos, en que los síntomas se van acumulando sin que exista un evento desencadenante.
Afecta más a mujeres que a hombres. Muchas personas con fibromialgia suelen tener: dolores de cabeza tensionales, trastornos de la ATM, síndrome de colon irritable, ansiedad y depresión.
Los síntomas principales de la fibromialgia incluyen:
La fibromialgia a menudo se confunde y/o coexiste con otras, como:
Se postula que la estimulación nerviosa repetida provoca cambios en el cerebro y en la médula espinal de las personas que padecen fibromialgia.
Los receptores de dolor del cerebro se vuelven más sensibles, pudiendo reaccionar de manera desmedida ante las señales de dolor.
Factores predisponentes:
Los factores de riesgo de la fibromialgia son los siguientes:
La fibromialgia afecta la capacidad para desenvolverse en casa o en el trabajo. La frustración de pelear con una enfermedad que socialmente no tiene mucha comprensión suele llevar al aislamiento social, así como a la depresión y a un aumento de la ansiedad del paciente.
Si bien no existe una cura para la fibromialgia, hay distintas opciones que mejoran la calidad de vida de los pacientes:
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